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Messeptiembre 2020

Expiación (2001)

Aquí estoy, otra vez, tratando de darle una nueva oportunidad a Ian McEwan, cuya primera novela que leí, “Amsterdam” (1998), y de la que ya hablé en su momento por estos lares, no me gustó nada. Tras ese intento fracasado de ver qué es aquello que tantos resaltan de este autor, lo he intentado con su novela más conocida, “Expiación” (2001), que es de la que vengo a hablar hoy. Sin embargo, y para ir ya adelantando, diré que tampoco ha conseguido cautivarme —ni mucho menos—, aunque sí ha conseguido generarme algo más de interés. Comencemos, pues.  

Feminismo en el siglo XXI. Primera parte: una incipiente aproximación en busca de la cifra

El temita de moda. Quizá los más fieles se hayan dado cuenta de que, desde nuestros inicios, allá por el curso 2018-2019, el feminismo es un tema que sólo hemos tratado de manera colateral. Esto es una anomalía, teniendo en cuenta el carácter eminentemente crítico de este blog con la situación actual; y, por eso, consideramos necesario señalar que la elección de no meternos de lleno hasta ahora no ha sido casual. La idea germinal de lanzarnos a escribir en la red ya había tomado forma el curso anterior, empezando a moldear los mimbres de esta web en enero de 2018. Las razones que nos llevaron a ello son muchas y variopintas, pero una de las más poderosas era la palmaria decadencia de los medios digitales bajo una influencia angloamericana de fondo pragmatista, superficie posmoderna y adorno progresista —todo esto, en los sentidos más indefinidos y acríticos de las palabras—; siendo la vanguardia de todo aquello, a través de la ‘podemización’ de la sociedad, la moda creciente de un feminismo cada vez más indefinido y acrítico, argamasado con la teoría queer en un pastiche propagandístico que se conoce habitualmente como la «ideología de género». Nuestro proyecto caminaba con calma filosófica hasta que nos dimos cuenta de que ese mismo año, al igual que estallaba esta influencia, estaba produciéndose una reacción contraria, la cual nos provocó adelantar los planes y… Bueno, creo que empieza a ser conveniente dar un poquito de contexto. Empecemos.

Star Wars: Caballeros de la Antigua República (2003)

Comenzamos este tercer curso con una nota de variedad: la crítica de un clásico dentro de los videojuegos. Pero, antes de meternos de lleno con esta invitación a volver o a descubrir —incluso a volver a descubrir— esta obra de referencia, vamos a darnos dos párrafos para ensayar una defensa de la importancia del octavo arte: el ‘videojueguil’ (sí, el término es muy mejorable; algunos utilizan «softófilo», aunque es preferible «ludófilo»). En cualquier caso, y previamente, deberíamos volver a recordar la cuestión de qué es el arte en general, sin privarnos de, por lo menos, otro par de párrafos, a ver si, artículo tras artículo, vamos delimitando algo intuitivamente tan sencillo, pero intelectualmente tan polémico e inmenso. No perdamos más tiempo con presentaciones, y pensemos una vez más qué es lo diferencial y significativo de una obra artística frente a cualquier otra obra. Pero me temo que tendremos que empezar aún más lejos, con la diferencia entre una obra y el resto de las cosas. Comencemos ya, que esto se complica por momentos.